Arcadi Espada.
Mi columna de hoy tiene un iceberg debajo. O un infierno. Apenas pude exhibir ese dato de la edad de jubilación de los empleos duros en Grecia. Pero Michael Lewis da en el mismo capítulo griego de Boomerang muchos otros.
Con placer ofrezco al dilecto lector una selección:
«Los Ferrocarriles Nacionales tienen unos ingresos anuales de cien millones de euros frente a unos gastos anuales de personal de cuatrocientos millones, más otros trescientos millones de euros en otros gastos. El empleado medio de los ferrocarriles estatales gana sesenta y cinco mil euros anualmente. Hace veinte años, un próspero empresario llamado Stefanos Manos, nombrado después ministro de Finanzas, señaló que sería más barato meter a todos los pasajeros de los ferrocarriles griegos en taxis: sigue siendo verdad.»
«El sistema sanitario público griego invierte en suministros mucho más que la media europea; y me cuentan varios griegos que no es raro ver a enfermeras y médicos salir del trabajo con los brazos cargados de toallas de papel, pañales y cualquier otra cosa que puedan sacar de los armarios de los suministros.»
«El sistema de enseñanza pública es escenario de una pasmosa ineficiencia: uno de los sistemas peor valorados de Europa que, no obstante, tiene cuatro veces más profesores por alumno que el mejor valorado, Finlandia. Los griegos que mandan a sus hijos a las escuelas públicas sencillamente dan por sentado que tendrán que contratar profesores particulares para asegurarse de que verdaderamente aprendan algo.»
«El mayor problema que tuvieron los bancos fue que habían prestado al gobierno griego alrededor de treinta mil millones de euros; ya fuesen robados o despilfarrados. En Grecia los bancos no hundieron al país; el país hundió a los bancos.»
«(...) El déficit previsto aproximadamente en siete mil millones de euros era, en realidad, de más de treinta mil millones. (...) En cuanto al ministro de Finanzas tuvo la cifra, se fue a la reunión que, de manera regular, tenía programada cada mes con los ministros de Finanzas de todos los países europeos. "Cuando les comenté la cifra se oyeron gritos ahogados de sorpresa" (...) "Me entraron ganas de decirles que ellos deberían haberse fiado en que los números no cuadraban. Pero el problema era que yo estaba sentado detrás de un letrero que decía 'GRECIA' y no de uno que dijera 'EL NUEVO GOBIERNO DE GRECIA'.»
«El ministro de Agricultura había creado una unidad no contabilizada que daba empleo a doscientas setenta personas para digitalizar las fotografías de las tierras públicas griegas (...). El problema fue que ninguna de las doscientas setenta personas tenía experiencia alguna en el campo de la fotografía digital. Su verdadera profesión era la peluquería, por ejemplo.»
«El grueso del colectivo de autónomos (todos, desde médicos a quiosqueros) engañaba a Hacienda; una razón de peso para que Grecia tenga el porcentaje más alto de trabajadores por cuenta propia de cualquier país europeo.»
«Grecia es el único país europeo que no tiene ningún Registro Nacional de la Propiedad, algo muy conveniente para el mercado negro. "Tienes que saber dónde ha comprado un individuo un terreno, la dirección, para vincularlo con su persona (...). Y aun así está todo escrito a mano y resulta difícil de descifrar".»
«Una antigua funcionaria del FMI, convertida en asesora financiera del antiguo primer ministro griego Konstantinos Mitsotakis y luego analista de Salomon Brothers (...) señaló en 1998 que la suma de todos los déficits presupuestarios griegos de los quince años anteriores ascendía únicamente a la mitad de la deuda del país. Eso significa que la cantidad de dinero que el gobierno griego había prestado para financiar sus operaciones duplicaba su déficit declarado.»