Es un libro colosal, que debe leerse. Incluido en mis libros.
El libro es un análisis minucioso de la injusticia que se cometió con Ahmed Tommouhi y Adderrazak Mounib, acusados y encarcelados por unos delitos que no cometieron. Las declaraciones de algunas de las víctimas fueron la única prueba para su encarcelamiento. El libro demuestra la incompetencia, y algo más, de muchas personas que intervinieron en el proceso: policías, fiscales, jueces (extracto del libro), periodistas y políticos, con mención especial para algunos de los abogados defensores. El libro describe las acciones de cada uno de ellos.
Tommouhi estuvo en prisión desde el 13 de noviembre de 1991 hasta 21 de septiembre de 2006, Mounib desde la misma fecha hasta que murió en prisión el 26 de abril de 2000.
En el libro también se demuestra que en una democracia, aunque las instituciones fallen, las personas son capaces de ayudar a resolver situaciones injustas, o al menos de denunciarlas. En este caso Manuel Borraz, María José Henares, Reyes Benítez, Soledad Gomis, Arcadi Espada y otros, incluido el autor del libro, Braulio García Jaén.
Estoy escribiendo un libro sobre dos marroquíes, Ahmed Tommouhi y Abderrazak Mounib, físicamente muy parecidos a dos violadores, que fueron cazados al azar y condenados por la cara en Barcelona en 1991. Cuando se demostró científicamente que había habido un error, las víctimas no lo reconocieron, los periodistas no tuvieron tiempo ni espacio para contar cómo se había producido ese error, y los responsables no respondieron. Mounib murió en la cárcel en 2000. Tommouhi, en libertad condicional desde septiembre de 2006, sigue cumpliendo condena.
En el libro, página 88, el autor escribe que conoció el caso por Arcadi Espada:
Este abril [de 2004] hace cuatro años del inicio de una de las mayores vergüenzas de la reciente historia judicial y política española. Y de la vergüenza sólo está por completo a salvo el señor Manuel Borraz.
Manuel Borraz escribe en la portada de la web dedicada al caso:
Los súbditos marroquíes Ahmed Tommouhi (a veces escrito Tommouch) y Abderrazak Mounib fueron condenados por diversos delitos cometidos en 1991 en el marco de una serie de agresiones sexuales que tuvieron lugar en Cataluña. Las únicas pruebas de cargo fueron las identificaciones que hicieron algunas víctimas a partir de ruedas de reconocimiento.
Una de las condenas fue anulada en 1997, después de que unas pruebas de ADN los exculparan y demostraran la culpabilidad de un ciudadano español -un violador reincidente de gran parecido físico con Tommouhi- y un cómplice no identificado. No obstante, permanecieron en prisión cumpliendo las demás condenas, dado que en las otras causas -según se dijo- no se dispUna de las condenas fue anulada en 1997, después de que unas pruebas de ADN los exculparan y demostraran la culpabilidad de un ciudadano español -un violador reincidente de gran parecido físico con Tommouhi- y un cómplice no identificado. No obstante, permanecieron en prisión cumpliendo las demás condenas, dado que en las otras causas -según se dijo- no se disponía de pruebas similares.Pese a existir muy serias dudas sobre su culpabilidad, los recursos de revisión presentados ante la Justicia española no prosperaron. Mounib falleció en la cárcel en el 2000. Tommouhi salió en libertad condicional en septiembre de 2006, tras pasar CATORCE AÑOS y DIEZ MESES en prisión. La libertad definitiva no le llegó hasta abril de 2009.A lo que ocurrió hasta mediados de los noventa podrían llamarlo error judicial. Lo sucedido después no tiene nombre...Pese a existir muy serias dudas sobre su culpabilidad, los recursos de revisión presentados ante la Justicia española no prosperaron. Mounib falleció en la cárcel en el 2000. Tommouhi salió en libertad condicional en septiembre de 2006, tras pasar CATORCE AÑOS y DIEZ MESES en prisión. La libertad definitiva no le llegó hasta abril de 2009.A lo que ocurrió hasta mediados de los noventa podrían llamarlo error judicial. Lo sucedido después no tiene nombre...
Más lecturas:
Dos hombres por Arcadi Espada. 13.04.2004.
Entrevista a Braulio García Jaén. Marzo de 2011.