No basta con llamamientos entre nosotros.
La situación es gravísima. El régimen pretende, hasta con la muerte, silenciar la voz de esta auténtica luchadora civilista; porque sabe que en ella se conjugan el coraje, la capacidad y la dificilísima humildad cristiana, que conquistan corazones.
La tiranía teme al valor de esta irreductible opositora y es capaz de dejarle morir en huelga de hambre si no movilizamos, en formidable campaña, a las organizaciones internacionales de derechos humanos, parlamentos, gobiernos, personalidades y medios de prensa.
Dirijámonos con cartas urgentes a esas entidades. A continuación, algunas direcciones:
Naciones Unidas Derechos Humanos mailto:InfoDesk@ohchr.org
Reporteros sin fronteras: rsf@rsf.org, ameriques@rsf.org, europe@rsf.org, internet@rsf.org, rsfcanada@rsf.org, rsf@rsf-es.org, rwb_ny@rsf.org
Carter mailto:rwb_ny@rsf.org
Human rights USA gov HumanRightsWebsite@state.gov,
Human rights Europe mailto:HumanRightsWebsite@state.gov
También aquí se puede firmar por la libertad de ambos.
Fuente: La revolución de los gladiolos.