Muy interesante toda la entrevista. Destaco lo siguiente:
"¿Cómo es eso del que más atiende, menos aprende?
Puede sonar confuso, pero me explico. Imagina que le das un texto a diez mil chicos y luego haces ejercicios de comprensión y tratas de medir un montón de cosas para saber qué ha hecho que la mayoría de los chicos hayan entendido el texto o no. Hay muchos factores, pero el más importante es cuánto conocía el chico sobre ese tema, dónde estaba parado. Imagina una clase sobre historia, sobre los griegos. Si nunca escuchó hablar de ellos y te hablan de un rey y una disputa sobre un río y que otro rey lo atacó… Cuando tú le cuentas esa historia pero le dices que el rey era Parsimínides, el que nunca escuchó esa palabra se queda colgado ahí y no sigue más. En cambio, el que ya sabe que hay palabras que no significan nada o que las tiene que ignorar, lo comprende mejor. El primero está haciendo muchísimo esfuerzo por traducir una palabra difícil, por adquirir algo que no forma parte de su léxico. La paradoja es que estaba atendiendo muchísimo más que los otros.
¿El truco para aprender es llevar el concepto a zonas más profundas y pensar menos en ello a nivel consciente?
Eso lo saben casi todos los maestros de música. Yo estudio guitarra y mi maestro me dijo “tienes que pensar para no pensar”, tienes que repetir muchísimo, tirar muchas veces a canasta o tocar muchas veces la guitarra para que esa secuencia salga sola y no piensas más en ello. Pero para que eso se haya vuelto una palabra de tu léxico tienes que haber trabajado muchísimo."
"Pero a la vez tenemos algo de serie, que son los sesgos cognitivos y que también están contagiando peligrosamente el conocimiento “averiado”.
Claro, porque otra cosa compulsiva del ser humano es que somos creadores de teorías o constructores de historias. Uno no registra los hechos, sino su propia reconstrucción de los hechos. Los chicos forjan teorías desde muy pequeños sobre el porqué de las cosas. Y esas inferencias, ese ir mas allá de los datos, eso es la virtud y el karma del ser humano. Así somos. Eso ha hecho que tengamos una teoría de la relatividad, que entendamos las relaciones humanas… y también hace que construyamos fanatismos sin sentido, que pensemos que las vacunas producen autismo. Ese mismo mecanismo por el cual con pocos datos construimos una historia ha sido combustible para la ciencia y también para el delirio."
Fuente: Francisco Capella (https://intelib.wordpress.com/2017/08/02/recomendaciones-1782)