Obra maestra de Robert Wise y Jerome Robbins. Incluida en mis películas. La película es una versión de Romeo y Julieta ambientada en el Bronx. La historia es lo que menos me interesa de la película. Me interesan la música, las canciones, los bailes, los decorados, la ambientación, el color, la luz y el ritmo. Durante dos horas y media se disfruta del cine, ese cine que ya no volverá, como siempre dice el maestro Garci.
Aunque a Garci le considero un maestro, no estoy demasiado de acuerdo con la afirmación de que este cine ya no volverá. Opino que no se ha ido ni se irá nunca, forma parte de nuestros recuerdos, de nuestros gratos recuerdos viendo, escuchando y tarareando sus canciones como en el caso de ésta película, llorando y riendo como en el caso de otras, en tensión e intriga, en sobresaltos,etc cientos de sensaciones experimentadas con las pelis incluidas en mi lista. Pero creo que lo que si no volverá es la forma de hacer ese cine casi de artesanía. Y aunque pueda parecer un poco nostálgica yo aprendí a amarlo de esa manera.
ResponderEliminarA eso se refería el maestro Garci. Me he expresado mal en la entrada. Esa manera de hacer cine es lo que nunca volverá.
ResponderEliminarPor suerte, igual que otras obras de arte, siempre podremos disfrutar de esta y otras maravillosas películas.