Película con una gran factura técnica de Leo McCarey y estupendas interpretaciones. La elegancia que desprende es lo mejor. La primera mitad, en el barco y en la Costa Azul francesa, me encanta. Diálogos inteligentes, situaciones divertidas y toda esa elegancia antes mencionada. Creando la atmósfera adecuada para la historia de amor. Todo funciona como debe. Cary Grant está a su nivel habitual, excelso, al igual que Deborah Kerr. Me creo totalmente su historia de amor.
Si no ha visto usted la película no siga, voy a destriparla.
La segunda parte no me la creo, quedan en lo alto del Empire State Building seis meses después de su encuentro en el crucero si es que han fracasado sus respectivos proyectos de boda, pero ella tiene un accidente y no puede acudir. Él si acude. Ella queda impedida temporalmente y decide no buscarle y explicarle lo que le pasó. No entiendo esa parte, me chirría que él por orgullo no la busque y que ella, no se muy bien por qué, no haga todo por volver a estar con él y explicarle todo.
El final es muy bueno pero al no haber entendido bien la parte anterior no llega a emocionarme.
La incluyo entre mis películas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario